Mis queridos devotos. Les envió todo mi afecto desde Vrinda
Kuñja donde llegamos hoy por la mañana a
la hora de Mangal artik.
Hoy quiero ofrecer mis más humildes reverencias a Sri Sri
Guru Gouranga Radha Vraja Mohan que son quienes nos han dado la misericordia de
poder estar celebrando este trigésimo
aniversario de la Familia Vrinda en Vrindavan. Es muy auspicioso y me pone muy
contento, quiero pedir la misericordia de Sri Sri Guru Gouranga Radha Vraja
Mohan de poder seguir sirviéndolos. Ellos vinieron a este templo para aceptar
nuestro servicio y estamos muy agradecidos.
Además, ellos nos han inspirado y guiado en todos estos años
y en tantas direcciones diferentes, prácticamente podemos decir que Sus Señorías
han sido la inspiración para seguir viajando y predicando como un peregrino
mendigo de amor; esa es mi profesión. Hay veces que en la frontera me preguntan
a que me dedico y yo digo eso: soy un peregrino mendigo de amor :)
Entonces, hoy comienza la celebración de los 30 años de la
Familia Vrinda en Vrindavan. Este va a ser un año muy especial donde vamos a
proyectarnos mucho a nuestra vida espiritual, porque después de los 30 años una
persona es más que un adulto, lo mismo pasa con nuestra familia espiritual.
Estos 30 años marcan el hecho de que ya es hora de madurar y
de encaminarnos correctamente. Significa que ya llegó la hora de que los
devotos que han estado acompañándome durante este tiempo tengan que tomar
responsabilidades importantes en su prabhu datadesh y establecerse en servicio
en algún sitio donde puedan cuidar a las personas que están bajo su protección.
Que se preocupen que la familia multifacética
tenga continuidad. Claro, yo no me siento muy calificado para hacer esto e
incluso tengo que lanzar a otros, que tampoco son calificados, para que se
conviertan en representantes de alguien tan excelso y calificado como Srila
Prabhupada.
-Uno se pregunta cómo es posible esto, es como decir que hay
un profesor de matemáticas que recién está aprendiendo matemáticas. Pero, de
una forma u otra, todo se va arreglando con humildad y así uno puede hacer un
servicio para el cual no está preparado. Y con esa humildad le podemos decir a Srila
Prabhupada que gracias a su misericordia todo esto camina. Y claro, cuando
quieres delegar y entregar esta responsabilidad a otros, se hace aún más difícil.
Esta noche escuché una clase muy bonita y emocionante de
Srila Prabhupada en la cual hablaba sobre los bhajananandis. Me eco mocione
mucho con esta clase. Allí Prabhupada decía que los predicadores siempre están arriesgándose.
Pues en este mundo hay mucho potencial para desarrollar el servicio. Debido a
eso, un devoto predicador toma muchos riesgos en su intento de ayudar a otras
personas y Krishna toma muy en cuenta
esos riesgos.
Al mismo tiempo les da una protección especial a estos
devotos. Pues, cuando uno está dedicado solo a su bienestar personal termina
desarrollando una mentalidad vaga que no le va a permitir desarrollarse con más
profundidad. Ojala que tenga algo de profundidad para que no se hunda. Y claro,
esta última no es la línea de Srila Prabhupada. Al contrario. En esta clase
Srila Prabhupada glorificaba abiertamente a aquellos devotos que se arriesgan
de compartir con otras personas lo que han aprendido con su maestro espiritual.
En ese sentido, yo me atrevo de continuar animando a otras
personas a que se sacrifiquen también y hagan algo grande para Srila
Prabhupada, que confíen en él, que lean sus libros. Que hagan todas las cosas
que nuestros maestros han hecho, pues,
de esta manera ellos llegaran a crecer espiritualmente y se volverán parte de
esta transacción mística. Mística y milagrosa. No se puede comprender el hecho
que incluso podemos ser sannyasis y difusores - comunicadores del mensaje
divino de Sri Gouranga. Eso entra totalmente en la categoría de la misericordia
sin causa e inexplicable.
La verdad, yo me siento muy agradecido con Srila Prabhupada
y con todos aquellos que llevaron su mensaje por todos los lados, pues si
Prabhupada no hubiese tenido a esos devotos, neófitos en su tiempo, que
llevaron su mensaje, esto no hubiese llegado hasta nosotros.
El hecho que Prabhupada tuviera discípulos en todos lados
asegura que su mensaje se estaba expandiendo hacia todos los sitios. Aunque él
mismo no estuviera en todos lados, pero sí estuvo a través de sus
representantes. A todos ellos yo ofrezco mis reverencias.
También me pongo a pensar en el hecho que una persona que
tiene tan poca experiencia como uno (que aunque hayan pasado algunos años mas,
pero ante la Suprema Verdad sigue siendo como un niñito chiquito) siga teniendo
la chance de servir. Por eso yo estoy más que convencido que cada devoto, de
una manera u otra, es un siksa-guru. Allí no hay mucho que discutir al
respecto, más bien es una realidad.
Generalmente el discípulo no tiene una asociación tan constante con el
diksa-guru, eso es muy difícil. Generalmente uno está con el diksa-guru unos días,
o un mes, más es algo inédito. Yo mismo solo compartí poco tiempo al lado de mi
Gurudeva, Srila Prabhupada. Lo vi unas 20 veces, pero siempre esporádicos,
aunque estuve un mes en la India en el 76, pero uno casi no lo veía, pues
Prabhupad siempre estaba muy ocupado. Pero me siento muy afortunado de haber
estado.
De todos modos, el hecho de estar al lado del Maestro
Espiritual haciendo un servicio personal a él es algo muy difícil, esos son
pocos momentos en la vida y, más bien, uno tiene que vivir de ellos el resto de
la vida. Claro, yo tuve también la chance de asociarme con Srila Sridhar
Maharaj y Srila Puri Maharaj. Luego también con Srila B.B. Tirtha Maharaj y
otros vaishnavas tan excelsos. Con ellos yo pude tener cierta cercanía, tocar
sus pies, sentir su vibración, ver su sonrisa, recibir su abrazo y todo ello
tan maravilloso. Así me siento muy afortunado y ustedes también tienen esa
oportunidad de asociarse con grandes vaishnavas de las diferentes misiones.
El punto principal es que el siksa-guru es quien tiene la
responsabilidad de cuidar la vida de los devotos y dirigir el refugio de ellos.
Es un servicio principal y muy especial. Así como la persona más importante en
la cocina es el cocinero, el siksa-guru es esencial en la vida espiritual del discípulo.
Debemos ser muy cautelosos y no olvidarnos que somos
dependientes de la misericordia de Krishna. Cualquier cosa que hacemos es siempre por misericordia, es por
esa misericordia que sobrevivimos, continuamos en el sendero y podemos actuar
como representantes y entregar todo lo que nuestro Gurudeva nos ha dado.
Así, mis queridos, este año número 30 de la Familia Vrinda
va a ser un año de lanzar cohetes. Lanzar cohetes vaishnavas hacia su servicio,
con mucha, mucha, mucha autonomía. Claro, el devoto no quiere ser autónomo, por
naturaleza el devoto quiere ser muy dependiente de sus guardianes, pero, aun
siendo dependiente, es muy importante que uno asuma la responsabilidad en esta
tarea de convertirse en un representante, un guía espiritual.
Todo esto es natural y debe seguir siendo natural. Familia
significa que de una familia luego nacerán muchas familias, si no es así
entonces la familia comienza a extinguirse. Lo maravilloso es que cuando una
familia da origen a muchas familias se convierte en una dinastía. Yo espero que
nuestra familia se vuelva una dinastía de Sri Gouranga Mahaprabhu.
Nosotros recibimos mucha misericordia de Srila Prabhupada y
esa misma misericordia es la posibilidad de volvernos un representante de Srila
Prabhupada. Recientemente tuvimos la misericordia en nombre de Srila
Prabhupada, de ser aceptado como un mamo unificador de las culturas
ancestrales. Los mamos kogis y los mamos arhuacos, que son los guías
espirituales de dos pueblos nativos de Colombia, juntos nos concedieron esta
responsabilidad de unificar y difundir esta sabiduría ancestral.
Yo no sentí que esto fue algo para mí, mejor dicho, yo sentí
que Srila Prabhupada estaba siendo reconocido por ellos. Fue un reconocimiento
del ámbito espiritual de las culturas nativas. Hacia nuestro querido Srila
Prabhupada, quien es sin duda alguna, un mamo.
Este reconocimiento que se realizó en Varsana durante el
encuentro "El llamado de la montaña"
fue un plan de ellos, pues incluso nos trajeron la túnica de mamo y la
entregaron.
El hecho de haber sido nombrado mamo es para mí un gran
reconocimiento a Srila Prabhupada y a su misión en Latinoamérica. Pues es difícil
que alguien sea aceptado por los pueblos nativos, porque ellos se mantienen
aislados para proteger su cultura. Sin embargo, Krishna y Srila Prabhhupad lo
hicieron de tal forma, que los devotos se volvieron distribuidores de prasada
en algunos importantes encuentros de los pueblos nativos de diferentes países.
Los pueblos nativos de Colombia reconocieron a los
vaishnavas como una de las 100 tribus originarias del país, lo que demuestra lo
abiertos de corazón que son todos ellos para aceptar a los devotos y su filosofía.
Con esto me despido,
Su siempre bienqueriente
Swami B. A. Paramadvaiti.
